Carbones Alto Carrión firma la compra de la mina San Isidro y María
Un notario de Gijón otorgó las escrituras de propiedad del pozo de Velilla al socio capitalista José María Rojo
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
Los socios que componen la empresa Carbones Alto Carrión firmaron el pasado martes en Gijón (Asturias) la escritura de compra de los bienes de la liquidada mina Carbones San Isidro y María, en proceso concursal desde su cierre el pasado año. El notario gijonés Carlos Bruno Martín Pérez-Nava otorgó la escritura a José María Rojo, que presentó la oferta por los bienes de la mina ante el Juzgado de lo Mercantil de Gijón y que fue quien firmó el documento de compra. En el despacho del notario estuvieron presentes el resto de los socios de la empresa compradora.
Los accionistas, José María Rojo y Fely Martínez, socios capitalistas, y José Luis Fernández, administrador único de Carbones Alto Carrión, se reunieron ayer en Guardo para celebrar la compra.
El proceso comenzó con la adjudicación provisional el pasado 3 de julio, una adjudicación a la que podían presentar alegaciones las partes interesadas, como podían ser Banco Ceiss o la Abogacía del Estado. Ante la falta de alegaciones, el juez hizo la adjudicación a definitiva el pasado 28 de julio, según han indicado fuentes de Alto Carrión.
La nueva sociedad propietaria de la explotación y de diversos enseres de la antigua mina Carbones San Isidro comenzará a adecuar la explotación con varios trabajadores, «porque ahora mismo es imposible poder meter a todos, ya que la explotación no está lista para comenzar los trabajos, puesto que requiere un proceso de adecuación intenso», explicó José Luis Fernández.
Mientras tanto, la empresa Carbones Alto Carrión, quedará en esta semana inscrita en el Registro Mercantil de Palencia, adonde se desplazaron ayer los socios para solicitar ante Minas la autorización de explotación.
Lo que sí han adelantado es que la mina pasará a denominarse Pozo La Fely, nombre de la socia capitalista, «porque se ha embarcado en una aventura de dos locos apasionados por la mina, que lo único que queremos es recuperar la minería», aseguraba José Luis Fernández.
Por su parte, Fernández solicitó la colaboración de las centrales sindicales, «porque queremos crear empleo. El poner trabas y criticar a los que queremos dar trabajo solo dificulta una labor ya de por si complicada», aseguró, en clara referencia a las declaraciones del secretario comarcal de UGT, Carlos Mesa.
