Fieles a la cita del Brezo
Miles de devotos de la patrona de la Montaña peregrinan hasta el santuario de Villafría para encomendarse a la Virgen
JOSE CARLOS DIEZ / VILLAFRÍA DE LA PEÑA
La tradicional romería del Brezo que se celebró ayer en el Santuario de la Virgen del Brezo, en honor a la patrona de los pueblos de la Peña, acogió ayer a un enorme grupo de fieles, que según los responsables del operativo de seguridad, superaron las 6.000 personas.
Muchos llegados desde la comarca, de los pueblos de los municipios de Guardo, Velilla del Río Carrión, Santibáñez de la Peña y Castrejón de la Peña, además del resto de los municipios de la provincia y de la región, sin olvidarse de visitantes de Madrid, Cataluña o País Vasco.
Notable fue también la presencia de los cántabros de la Vega de Pas y del valle de Liébana, fieles seguidores de la imagen mariana de la Montaña Palentina, que también causa devoción en las provincias vecinas de León y Burgos.
Un día en el que, además, el tiempo fue ideal, ni frío ni calor, pero sí un sol que permitió que decenas de personas pudieran permanecer en la campa para comer y poder disfrutar de un estupendo día de campo.
Los preparativos para la celebración comenzaron el día anterior, por parte de los devotos con la preparación del altar en la parte trasera del santuario y de la zona de aparcamiento por parte de las fuerzas de seguridad, que mantuvieron un dispositivo durante toda la noche para evitar incidentes.
Ya desde primera hora los fieles acudieron al santuario, donde a las once de la mañana se celebró una primera misa, preludio de la importante eucaristía que tiene lugar a las 13 horas en el altar trasero, después de una breve procesión entre el interior del templo y el lugar de celebración de la misa.
A la celebración eucarística, acudieron el presidente de la diputación, José María Hernández, el alcalde pedáneo de Villafría de la Peña, David Narganes, además de los alcaldes de Santibáñez de la Peña, Velilla del Río Carrión y Guardo, Manuel Maza, Gonzalo Pérez y Juan Jesús Blanco.
Una eucaristía en el que el punto fuerte lo puso la soprano Ana Clara, que emocionó con su potencia vocal y que acompañó al coro en todas las piezas.
Finalizada la misa, los cofrades portaron a hombros las andas de la Virgen, mientras los centenares de fieles, que se congregaban en la campa, despedían a la imagen mariana con pañuelos blancos, una tradición muy arraigada de esta romería.
Tras cantar en la puerta del santuario la Salve, la talla fue introducida en el templo y presidió el altar durante el rosario que se celebró a las cuatro y media de la tarde. Muchos fueron, además, los que aprovecharon para subir a la cruz, donde decenas de fieles acuden cada año para, además de realizar un bonito paseo para contemplar la Montaña Palentina desde las alturas, realizan sus peticiones a la Virgen o le muestran su agradecimiento.
La romería contó con la presencia de numerosos efectivos de la Guardia Civil, que desplazó a efectivos de los cuarteles de Velilla del Río Carrión, Guardo, Saldaña y Buenavista de Valdavia. Tuvo también presencia la Cruz Roja, que desplazó voluntarios de Guardo, Aguilar de Campoo, Palencia y Valladolid, que tan solo tuvieron que atender pequeños mareos por el calor. Por su parte, los servicios de extinción de incendios, que también participaron en el despliegue de seguridad no tuvieron que intervenir.
Por la tarde, la orquesta La Huella 2.0 puso el punto y final a esta romería con un baile en el prado de Aviñante de la Peña, en el cruce de la carretera que sube al santuario.
