Puente Agudín, con su creador
La Fiesta de la Montaña Palentina rinde homenaje a Manuel Mediavilla, que presidió el CIT durante más de cuatro décadas y que falleció en mayo
JOSE CARLOS DIEZ / CARDAÑO DE ABAJO
La cita en todas las agendas de Palencia tenía ayer el mismo destino: Puente Agudín. Está claro que cada vez la Fiesta de la Montaña Palentina gana más adeptos y lleva a más personas hasta la campa, en el cruce de la Ruta de los Pantanos con la carretera de Cardaño de Arriba. Acudieron centenares de vecinos de las localidades cercanas, como Camporredondo, Otero, Velilla, Guardo o Cervera, aunque tampoco faltaron asistentes del resto de la provincia y de la vecina León, además del resto de la geografía nacional, algunos procedentes del País Vasco o Madrid.
Antes de las diez de la mañana llegaban a la campa los artífices del guiso del pastor –el cocinero mayor del CIT, Salvador Varela; acompañado de Ángel Martínez, tradicional ayudante y Samuel García, que a sus 25 años es la última incorporación en la cocina, después de que el año pasado comenzara a ayudar en la elaboración del guiso–.
A las diez de la mañana comenzaron las primeras actividades programadas, entre ellas la ruta de senderismo a la Cascada de Mazobre de la mano de Ten Escapadas, que propuso la salida desde su stand en la campa de Puente Agudín. Sería entonces también cuando el CIT recibiría a todos sus visitantes con mistela y pastas, con el fin de amenizar la espera hasta los actos más tradicionales de la fiesta. A mediodía se realizó la tercera visita guiada a la cueva de Agudín con guías expertos de Velilla del Río Carrión y de la Unión Espeleológica Vallisoletana (UEVA). Sin duda, uno de los actos estrella de los últimos años, en los que resultaron un verdadero éxito, por lo que este año, la directiva del CIT, en colaboración con la UEVA, han vuelto a organizar otras cuatro visitas guiadas, que se completaron nuevamente. Y es que, la cueva de Agudín es, sin duda, un verdadero tesoro desconocido.
El éxito de estas visitas ya auguraba que la petición que en anteriores ediciones de la fiesta realizó el anterior presidente del Centro de Iniciativas Turísticas (CIT), Manuel Mediavilla, sobre hacer visitable la cueva de Agudín, no es en balde, sino que tendría suficientes visitantes. Yeste año se ha confirmado, al haberse vuelto a llenar los cuatro turnos de visita. Aunque una demanda que no termina de hacerse realidad es el acondicionamiento de la cueva y su iluminación.
Antes de comenzar el pregón se homenajeó a Manuel Mediavilla, fallecido el pasado mes de mayo. Su sucesor al frente de la presidencia del CIT, Pedro Vargas, explicó que «nos encontramos ante el deber de rendir homenaje a la persona de Manuel Mediavilla Paredes y lo hacemos de una manera breve y sencilla, como a él le gustaba hacer las cosas. Manuel Mediavilla fue el fundador de esta fiesta que estamos celebrando allá por 1972 y desempeñó el cargo de presidente del CIT durante más de cuatro décadas, hasta que sus fuerzas, debido a su avanzada edad, no pudieron más», comenzó Vargas.
«Las iniciativas de Manuel Mediavilla, encaminadas al fomento del turismo en esta zona eran muy buenas, pero en aquellos tiempos los vientos soplaban un poco huracanados y, por ello, muchos de sus proyectos no pudieron ver la luz que él deseaba» y recordaba alguno de sus logros, como presidente y alcalde de Velilla «como la construcción del hotel, la reparación del túnel de Camporredondo y de la carretera Cervera-Velilla, además de la promoción del municipio desde el CIT», aseguraba su sucesor en el cargo.
Además, recordó que consiguió la incorporación de los ayuntamientos de Otero de Guardo, Camporredondo de Alba y Alba de los Cardaños al de Velilla del Río Carrión y que tenía la la medalla de oro de la Orden de Cisneros y la medalla del Ayuntamiento de Velilla del Río Carrión.
Seguidamente, el pregonero Ángel Cantera, presidente de la Asociación de Autocaravanas de Palencia, recitó a modo de juglar un poema que alabó la Montaña Palentina y la fiesta de Puente Agudín. Fue breve pero intenso, y uno de los que más ha gustado en los últimos años al público, que agradeció la brevedad y la intensidad del mensaje.
La coral la Reana tuvo que amenizar la espera para que pudiera comenzar la misa hasta la llegada del sacerdote, puesto que se retrasó al tener que desplazarse entre todos los pueblos de la parroquia.
Posteriormente se realizó la desgustación del guiso del pastor, para el que centenares de personas hicieron cola, con el fin de conseguir una de las raciones que se repartieron. Una degustación que costaba uno o dos euros, según el tamaño de la cazuela de barro (recipiente que pueden llevarse a casa), una iniciativa que comenzó hace dos años y que permite controlar las raciones que se reparten.
«Este año son 470 kilos de cordero, diez más que el año pasado, ajos, pimienta negra, cayena, laurel, tres kilos de pimentón, agua, tres kilos de sal y ocho botellas de aceite», explicaban orgullosos de poder estar al mando de la preparación Salvador Varela y Ángel Martínez, que este año se mostraron enfadados por las medidas que les han hecho tomar para cocinar la caldereta. «Llevamos toda la vida haciendo esta fiesta, jamás hemos dejado que una brasa salte fuera de la zona que controlamos, siempre tenemos agua preparada por si pasase algo y un camión de los bomberos cerca por si acaso», explicaban los cocineros entre una valla de uralitas que les habían obligado a colocar los agentes medioambientales.
Pero dentro de su enfado, se mostraban orgullosos porque «intentamos hacerlo cada año mejor», explicaban los cocineros, que comentaban que lo que más les gusta es «la propia preparación y el hecho de que la gente venga a felicitarnos, porque es la recompensa de un trabajo bien hecho y eso da mucha satisfacción. Si repiten el año que viene, es que este lo hemos hecho muy bien».
Entre los cocineros también se encontraba Samuel García, que a sus 25 años lleva dos colaborando y toda la vida acudiendo a las fiestas. «Más o menos voy aprendiendo a hacer la receta, pero me queda que me digan algún ingrediente que siempre se guardan en la manga», aseguraba el joven.
El reparto lo llevaron a cabo a turnos los numerosos políticos que acudieron al evento, entre ellos varios diputados provinciales y el alcalde de Velilla, Gonzalo Pérez, a los que se unieron los concejales socialistas del Ayuntamiento de Velilla, Luis Antonio Pérez, Belinda Mencía y Miguel Ángel García. También repartió el alcalde de Guardo, Juan Jesús Blanco y colaboró en la recogida de tickets María Victoria Álvarez. Hasta la campa también acudieron Rosa Aldea, Jesús Guerrero, Jesús González (alcalde de San Cebrián de Mudá) y numerosos cargos socialistas en toda la provincia.
Durante la tarde, los centenares de personas que acudieron a la campa a comer pudieron disfrutar de danzas y bailes regionales y un corro exhibición de lucha leonesa, para terminar la jornada con El Trío Ibiza.
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