Clásicos de cuatro ruedas en Guardo
Participantes de Madrid, Cantabria y País Vasco se dan cita en la sexta edición de la concentración de coches
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
La Asociación de Vehículos Clásicos de Guardo y los participantes en la sexta edición de la Concentración de Coches Clásicos de Guardo fueron ayer los protagonistas de la jornada en la Montaña Palentina, hasta donde llegaron 25 de estos clásicos, un número muy similar al del año pasado.
Según el organizador de la concentración, Javier Fraile, «la concentración ha estado muy bien, ya que este año han venido unas 40 personas a Guardo relacionadas con la concentración y muchos guardenses han salido a la calle para ver estos coches».
La participación, aunque ha aumentado, no termina de despuntar, en parte debido a la continua subida de los precios del combustible y el hecho de que el país no acabe de superar la crisis.
Aún así, los que sí que participaron llegaron no solo desde la zona, sino de puntos habituales, como Cantabria o el País Vasco, zonas algo más lejanas, como Madrid, que no dudaron en echarse a la carretera para acudir a esta cita en la Montaña Palentina. Como siempre, no faltaron joyas de la carretera, como un Ford de 1926 o un Citröen de 1942, los más antiguos de los participantes.
Después de una hora de encuentro en la calle Jorge Manrique, donde se dieron cita los participantes, los coches hicieron rugir sus motores para partir a una ruta guiada por la Montaña Palentina, en la que se contó con la colaboración del Motoclub Villa de Guardo, que proporcionó la música y varias motos de enlace para garantizar la seguridad de la caravana de vehículos.
Esta ruta visitó Velilla, el pantano de Compuerto, por donde cruzaron a través de la presa, para bajar de nuevo a Velilla, donde comieron un aperitivo en La Reana y después visitaron Mantinos para regresar a Guardo. La comida fue uno de los momentos más cercanos del encuentro, en el que la organización sorteó regalos para todos los participantes, entre ellos un fin de semana en una casa rural de la zona u objetos donados por el Ayuntamiento de Guardo.
