Fervor a la reina de las cumbres

Miles de fieles celebran los 50 años de la coronación de la Virgen del Brezo

JOSE CARLOS DIEZ

Cincuenta años han pasado desde el 21 de septiembre de 1961. Aquel día se celebraba la romería del Brezo de una manera muy especial. Bajo el mandato del obispo José Souto Vizoso, la patrona de La Peña, la Virgen del Brezo, recibía una distinción muy especial, su corona. Cuentan las crónicas que a la romería acudieron miles de personas, la mayor parte de ellas a pie. La devoción no ha decrecido medio siglo después, y ayer también miles de personas acudieron hasta el santuario del Brezo, desde todos los lugares de España, aunque especialmente desde la Liébana.
Desde primera hora de la mañana numerosos efectivos de la Guardia Civil, controlaron los accesos al santuario y ordenaron el tráfico, lo que no impidió que, debido a los numerosos visitantes, se produjesen retenciones de forma que se tardaba más de una hora en recorrer los dos kilómetros que hay desde Villafría de la Peña al Santuario.
La organización, con varios jóvenes voluntarios que esperaron a cada una de las imágenes llegadas desde toda la provincia, fue impecable. Todas las imágenes coronadas de la provincia estuvieron presentes, de una forma u otra, en las bodas de oro de la coronación de la Virgen del Brezo: Nuestra Señora de la Calle, de Palencia; Nuestra Señora de Carejas, de Paredes de Nava; Nuestra Señora de la Piedad de Herrera de Pisuerga; Nuestra Señora de Ronte, de Osorno; Nuestra Señora del Castillo, de Autillo de Campos; Nuestra Señora de Belén, de Carrión de los Condes; Nuestra Señora del Valle, de Saldaña, cuyo estandarte fue el que representó a esta imagen. También se excusó la ausencia de la Virgen de Valdesalce, de Torquemada, cuya fiesta se celebraba ayer. Quienes tampoco se lo quisieron perder fueron los cofrades de la Virgen del Llano de Aguilar, que quieren coronar a su virgen. Estas imágenes se sumaron a las dos de la Virgen del Brezo (la que permanece todo el año en el Santuario y la que se guarda en Villafría) y a la de la Virgen del Mar, que se sacó de su capilla para esta ocasión tan especial.
El alcalde de la localidad, Manuel Maza, destacó la gran afluencia de gente, «porque además del entorno, que es maravilloso, la Virgen del Brezo tiene mucha devoción», afirmó. Destacó la novedad de este año, una ofrenda floral.
El obispo de Palencia ofició la misa, concelebrada por una treintena de párrocos de la zona pastoral del Brezo, diáconos y seminaristas, además del vicario general. La celebración comenzó con la lectura de una bula papal, en la que Benedicto XVI bendecía a los cofrades del Brezo y se unía a la celebración. La soprano argentina Ana Clara interpretó el himno inédito a la Virgen del Brezo, solo cantado el día de su coronación y que se ha recuperado para este aniversario. Hubo también un recuerdo muy emotivo para Jesús Urién, que fue capellán del Brezo durante 42 años, y que durante todo ese tiempo trabajó por situar la romería en lo más alto.

Una mañana accidentada

Lo prolongado de la ceremonia religiosa y el calor hicieron que Cruz Roja tuviera que atender a más de una decena de personas por lipotimias y golpes de calor. Antes de la misa, una vecina de Collazos de Boedo, de 75 años, tuvo que ser atendida por los servicios de emergencia tras haber sufrido un traumatismo y una fractura en el tobillo, por lo que tuvo que ser trasladada al Centro de Salud de Guardo. Miembros de Cruz Roja y un agente del Seprona evitaron el desplazamiento de un helicóptero.