En tres minutos « Montar a caballo transmite una sensación muy especial »
Elena Fernández Villacorta, jinete
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
Elena tiene diecisiete años, pero lleva ya unos cuantos años desarrollando un estrecho vínculo con los caballos. Desde pequeña, la afición de su padre por los equinos, le hizo quererlos y apreciarlos y ahora, cuando participa en exhibiciones y competiciones, siente cómo los animales responden a ese cariño.
¿Cuándo comenzó a montar a caballo?
Desde pequeña. Cuando yo era pequeña, mi padre comenzó a tener los caballos, me gustaron y empecé a ir a la cuadra con él, aunque las exhibiciones y las competiciones ha sido un poco más tarde. Primero íbamos a pequeñas exhibiciones en los pueblos y poco a poco hemos ido yendo a más.
¿En qué concursos ha participado?
He participado en Cegoñal (León) dos veces, en Aguilar de Campoó, en Saldaña y Astudillo. En este último, era una romería, en la que todo el mundo saca a sus caballos, además de una exhibición y un partido de fútbol a caballo. Además, también estuve en Prioro (León) este año, donde se celebra la fiesta de la Trashumancia y se realizan exhibiciones ecuestres y en San Salvador de Cantamuda, participando en una ruta a caballo.
¿Qué premios ha ganado con los caballos?
El trofeo a la coordinación entre caballo y jinete y en otros concursos, una cabezada, una silla y percheros de forja.
¿Con cuántos caballos cuenta actualmente?
Tenemos diez caballos, pero sólo están domados cuatro, Mayo, Connor, Sendero y Ligón, aunque es con Connor con el que he ganado todos los premios. Cada fin de semana salimos a pasear con dos y les vamos turnando. Normalmente la doma la hace mi padre, aunque a mi me gusta, pero lleva mucho tiempo.
¿Qué es lo que mas le gusta del mundo del caballo?
Montar, porque la sensación que te transmite estar encima de un animal, que sabes que en cualquier momento te puede fallar, pero que no lo hace, con el que te entiendes, al que puedes dominar y al que controlas. La sensación es de completa satisfacción, porque ves que la relación con el caballo es muy cercana. Incluso, en la cuadra, cuando le saco, es como un perro, que viene detrás de mi allá donde vaya.
