EN TRES MINUTOS «Nunca hago un boceto, cojo un tronco y empiezo a tallarlo»

José María Bravo Artista de la madera – «El tiempo que invierto depende de la figura, a veces son cosas sencillas, y otras son meses»

JOSE CARLOS DIEZ / VELILLA

José María Bravo, residente en Velilla, lleva años dedicándose a la talla de madera, material en el que tiene multitud de obras, conocidas en toda la comarca, donde ha organizado varias exposiciones.

-¿Cómo comenzó en el mundo de la madera?

-Comencé en Valencia, donde se trabaja mucho la madera. Quería hacer un curso de fontanería, pero finalmente me apunté a uno de talla en madera. Me gustó tanto que continué aprendiendo por mi cuenta.

-¿Es una afición que hay que llevar en la sangre?

-Algo tendría en mí, porque el profesor me preguntaba si ya había hecho ese trabajo, cuando no había hecho nada en madera en mi vida. Después he hecho cosas por mi cuenta con las que he ido aprendiendo. Mi profesor me presentó al suyo, quien había hecho en Játiva las imágenes de la iglesia.

-¿Hace algún tipo de boceto o proyecto?

-Nunca. Sí que puedo tener a veces una idea de lo que quiero hacer, pero alguna vez cojo un tronco y me pongo a tallarlo sin saber qué es lo que voy a hacer.

-¿Qué tipo de madera le gusta más?

-Últimamente me decanto por el enebro, por su color y por lo bien que se trabaja, y que no salta como el pino. También se trabaja muy bien el olivo, que cojo en Extremadura. El roble de por aquí se trabaja muy bien.

-¿Dónde consigue la madera?

-La gente de la zona me trae los troncos en vez de quemarlos. Otros, los cojo yo en el campo. Muchas veces ves en el palo la figura final.

-¿Cuánto tiempo invierte en hacer una pieza?

-Depende de la figura. Hay cosas muy sencillas y otras en las que invierto meses. Hay que tener en cuenta que todo esto lo hago por afición, que nunca he hecho un trabajo para cobrarlo, porque cada pieza es única, y cuando lo hago, lo hago para pasar el rato, no para obtener más beneficio que la satisfacción de verlo terminado.