Bouzán y Llera cumplen en Velilla
Los asturianos del Club El Sella, que llegaban con el rol de favoritos, se imponen en la LV Regata del Carrión, competición que reunió a 250 palistas
JOSE CARLOS DIEZ / VELILLA
La fiesta de las piraguas volvió a celebrarse ayer en Velilla del Río Carrión de la mano de la LV Regata Internacional del Carrión, en la que se dieron cita en torno a 250 palistas de toda la geografía nacional, aunque como en cada edición, fueron los asturianos los más numerosos.
Los claros favoritos en el K-2 masculino eran los asturianos Walter Bouzán y Alberto Llera, y cumplieron con los pronósticos. Llegaban desde Ribadesella (Asturias) muy preparados y con mucha potencia para completar una prueba que, como cada año, volvía a estar complicada con la cantidad de algas del río y las corrientes que se forman en el embalse en que se disfruta la prueba.
Centenares de personas esperaban la salida en la margen derecha del río, único lugar habilitado para el público debido a las restricciones sanitarias, que hicieron que se restringiera el acceso al paseo de la Arboleda, que quedó reservado para deportistas, medios de comunicación y representantes de las administraciones, entre las que se encontraban la alcaldesa del municipio, Belinda Mencía; el delegado de la Junta, José Antonio Rubio Mielgo, y la diputada Mari Luz Martínez Seijo.
El público no faltó a la cita de las piraguas, que únicamente se ha visto suspendida con motivo de la pandemia el año pasado y que aprovechó el buen tiempo, con un calor superior a los treinta grados.
Puntualmente, se pudo dar la salida a los K-2, algo que no sucedía desde hace años ya que los palistas, habitualmente, sufren la corriente del río, lo que les hace adelantarse en la línea de salida y conlleva el apercibimiento de los jueces. En esta ocasión, las salidas fueron impecables y no se detectó ninguna irregularidad ni el jurado tuvo que apercibir a ningún deportista.
El momento más curioso de las sucesivas salidas fue la caída de uno de los piragüistas en una de las salidas de K-1, que se encontraba en el medio del agua y tuvo que nadar rápidamente para salir del agua, al ver como las embarcaciones venían velozmente hacia donde estaba.
También fue aplaudida la salida de la campeona mundial e histórica ganadora del Sella y del Carrión, la local Mara Santos, que este año quedó en segundo lugar en la general del K-2, por detrás de la campeona de España, Irati Osa, que hizo una carrera espectacular y que se mantuvo en la primera posición a su paso por la ciaboga de meta y, posteriormente, por la línea de meta.
En el K-2 senior femenino, las vencedoras fueron Maite Etxeba y Ane Zalla, por delante de June Aldarevia y Aida Tirado.
La entrega de premios se llevó a cabo de una forma singular, en el río y en un perímetro acotado, puesto que, debido a las restricciones sanitarias, los ganadores subieron al podio de la prueba pero nadie les entregó el trofeo, sino que su premio fue depositado en el podio para que los vencedores lo alzasen al cielo de Velilla del Río Carrión.