Las obras para visitar la cueva de Puente Agudín comenzarán en septiembre
El alcalde de Velilla anuncia en la Fiesta de la Montaña Palentina que la inversión ascenderá a 60.000 euros
JOSE CARLOS DIEZ / CARDAÑO DE ABAJO
Los más adeptos a la Fiesta de la Montaña Palentina, que cada año se celebra en la campa de Puente Agudín, en el cruce de la Ruta de los Pantanos con la carretera de Cardaño de Arriba, no quisieron faltar ayer a la cita organizada por el Centro de Iniciativas Turísticas Fuentes Carrionas. Así, decenas de vecinos de las localidades cercanas, como Camporredondo, Otero, Velilla, Guardo o Cervera, acudieron hasta la campa, donde tampoco faltaron asistentes del resto de la provincia y de la geografía nacional, como Madrid, Barcelona o Andalucía.
El tiempo hizo que el número de asistentes disminuyese con respecto a años anteriores, pero aún así, la fiesta del turismo de la Montaña Palentina y Fuentes Carrionas se convirtió en una de las más multitudinarias de los últimos años.
Los actos organizados comenzaron el sábado, con la primera visita guiada a la cueva de Agudín, una de las actividades estrella del pasado año, que resultó un verdadero éxito después de que decenas de personas se tuviesen que quedar sin entrar al superar el aforo máximo permitido, establecido en quince personas. Esto hizo plantearse a la directiva del CIT repetir la experiencia y ampliar el número de visitas.
El éxito de estas visitas ya auguraba que la petición que en anteriores ediciones de la fiesta realizó el presidente del CIT sobre hacer visitable la cueva de Agudín no es en balde, ya que cuenta con suficientes visitantes. Y la confirmación ha llegado este año, con los cuatro turnos de vista completos.
Esta petición está más cercana de convertirse en realidad, ya que el alcalde de Velilla del Río Carrión, Gonzalo Pérez Ibáñez, anunció ayer a El Norte de Castilla que la primera fase de las obras de adecuación de la cueva comenzarán en septiembre. En esta primera fase comenzará a adecuarse la zona exterior, facilitando el acceso desde el aparcamiento hasta la cueva por la falda de la montaña e invirtiendo en iluminación cerca de 60.000 euros, de los que 50.000 aportará el Grupo de Acción Local y 10.000 el Ayuntamiento.
430 kilos de carne
Los primeros en llegar ayer a la campa de Puente Agudín fueron Maximiliano Rebanal y Salvador Varela que, junto a Ángel Martínez, son algunos de los protagonistas de la jornada. Estos cocineros del CIT llevan en la organización de esta fiesta desde sus inicios, hace 42 años, y recuerdan cómo durante todo este tiempo la única variación que ha habido en esta celebración ha sido el ingrediente principal del plato estrella de la jornada, el guiso del pastor, que antaño se elaboraba con borregas y ahora con corderos.
A las 9:00 horas ya estaban en la campa para encender la hoguera con la leña de que disponían, algo verde y húmeda, pero que finalmente ardió para calentar las calderetas, que llenaron de carne. 430 kilos de carne para 25 calderetas en las que se elabora el guiso. «Hacemos el guiso en crudo, con la carne de cordero, le echamos agua fría, vino blanco, sal, guindilla, aceite, laurel, pimentón y pimienta negra», explican los cocineros, quienes aseguran que el secreto para que cada año esté más sabroso «es el cariño y la paciencia». Los cocineros señalan que cada año intentan superarse para agradar a todos los paladares. «Lo que más nos gusta es la propia preparación y el hecho de que la gente venga a felicitarnos, porque es la recompensa de un trabajo bien hecho y eso da mucha satisfacción», destacan.
Precio simbólico
Tras la misa y el pregón del palentino Fernando Gutiérrez Baños, hijo de Cándido Gutiérrez Espadas, creador de los centros de iniciativas turísticas y fiestas turísticas, se procedió a repartir las centenares de raciones del guiso del pastor entre los asistentes, que desde un par de horas antes guardaban ya su turno para poder degustar este popular plato, que este año tuvo un coste de uno o dos euros, según el tamaño de la cazuela de barro que los comensales pudieron después quedarse. «Es un precio que se ha puesto únicamente por controlar las raciones que se dan, no por lucro del CIT, ya que había personas que traían cazuelas y pedían cuatro raciones. Ahora, si quieren cuatro raciones, tendrán que aportar cuatro tickets», explicó el presidente del CIT, Pedro de la Varga.
El reparto de las raciones lo llevaron a cabo el presidente de la Diputación, José María Hernández; la vicepresidenta primera de la institución provincial, Ana Asenjo; la secretaria territorial de la Junta de Castilla y León, Silvia Aneas, y el alcalde de Velilla, Gonzalo Pérez Ibáñez.
Mientras algunos de los asistentes esperaban su turno para recoger el guiso del pastor, otros prefirieron hacer tiempo visitando los puestos del mercado artesano, en el que pudieron encontrar desde dulces hasta libros, pasando por artículos de herrería o de cuero. Este mercado, que fue una de las novedades de la edición anterior, volvió a ser uno de los mayores atractivos este año, contando incluso con la presencia del escritor de teatro guardense Pedro Santos Yarritu.
Los actos organizados ayer culminaron con una carrera de burros seguida por centenares de personas y con la actuación del Trío Estrella, que puso la nota musical a una jornada festiva para la Montaña Palentinam, en la que la reivindicación de convertir en visitable la cueva de Agudín parece que se encuentra muy próxima de convertirse en realidad.