Devoción más allá de las montañas
La Virgen del Brezo congrega en su santuario a miles de devotos llegados desde diferentes puntos del país
JOSE CARLOS DIEZ / VILLAFRÍA DE LA PEÑA
El Santuario del Brezo acogió ayer la llegada de miles de personas que, como cada año, se desplazaron desde diferentes puntos del territorio nacional para honrar a la patrona de la comarca en la que nacieron.
Diferentes puntos de la provincia de Palencia, el Valle de Liébana (Cantabria), León, Burgos, Madrid, o incluso Barcelona fueron las diversas procedencias desde las que llegaron las más de 10.000 personas que se dieron cita en la romería del Brezo, según los cálculos de la Guardia Civil, que veló por la seguridad del multitudinario evento.
Fue la coincidencia entre el sábado y la buena climatología la que permitió que la romería resultara un éxito de afluencia, por lo que en los alrededores del santuario se podía ver a personas participando en los actos religiosos, otras subiendo a la cruz, otras paseando, y otras más viendo los puestos ambulantes que llenaban parte de la campa.
Minutos antes del comienzo de la Eucaristía llegó el Obispo de Palencia, Esteban Escudero. A su llegada, los sacerdotes que ya estaban preparados acudieron al interior del templo, de donde partió la procesión. Tras dar la vuelta al Santuario, la Virgen fue colocada junto al altar, momento tras el que comenzó la Eucaristía, que fue presidida por el Obispo, y en la que también participó y adquirió cierto protagonismo el nuevo párroco de Santibáñez, Miguel Lobo, que ha sustituido a Andrés Garrachón, que también estuvo presente en el acto. «Durante la preparación he sido un mero observador. Los verdaderos protagonistas han sido los cofrades y los voluntarios, además del Ayuntamiento. Por supuesto, he contado con la colaboración de Andrés, el anterior párroco, ya que sin él y sus consejos me hubiese resultado muy difícil conocer toda esta celebración», señaló el nuevo párroco de Santibáñez.
Durante el sermón, el Obispo recordó a las personas en paro, los pobres y los enfermos, además de los difuntos, y animó a la gente a que lea a diario el Evangelio. «Los párrocos pueden facilitaros un libro con las lecturas del día a día o podéis comprarlos por uno o dos euros, pero hay que leer a diario el Evangelio y tener presentes a Jesús y a María», predicó Esteban Escudero.
Canto de la Salve
Concluida la Eucaristía, la imagen de la Virgen del Brezo volvió a procesionar hasta el interior del santuario, no sin antes esperar en las escaleras principales a que todos los fieles cantasen la Salve en su honor.
Tras los actos religiosos, el Obispo destacó la fe que profesan los miles de devotos que cada año acuden a la romería. «Llevo cuatro años en Palencia y he venido tres. Para mí la Virgen del Brezo es un acontecimiento de fe que no debe perderse nadie», destacó.
Durante la tarde se celebró el rezo del rosario y una eucaristía en la fuente de los pastores. Entre las novedades introducidas este año destaca el cambio de fecha de la misa de difuntos, que no tendrá lugar hoy, día siguiente a la romería, al ser domingo, sino que se celebrará el lunes.