El buen tiempo se alía con el programa para el éxito de las fiestas en Velilla
El alcalde, Gonzalo Pérez, destaca el espectáculo ecuestre, que desbordó las expectativas, y los fuegos artificiales
JOSE CARLOS DIEZ / VELILLA
El éxito de las fiestas de Velilla está casi garantizado. Sólo le hace falta un ingrediente para la receta perfecta: el buen tiempo. Este año, la meteorología ha sido benévola y las temperaturas altas, lo que ha ayudado a garantizar la afluencia de público a todos los eventos.
“El único día que teníamos más dudas fue el 15 por la mañana, que el tiempo amenazaba con estropearnos el día grande de las fiestas, pero finalmente nos hemos encontrado muy satisfechos, hasta con la nueva apuesta, la macro-discoteca, que ha sido todo un éxito, con la gente en la calle hasta las 05:00 horas” comentaba ayer el regidor velillense, Gonzalo Pérez.
“Cuando se prepara un programa de fiestas, se desea que el tiempo no falle, algo que se ha cumplido” apotilla el alcalde, que agradece a la gente que “haya colaborado, se haya disfrazado y participado en todas las actividades de las fiestas”. Aún así, reconoce que la afluencia de público al concierto, por poner un ejemplo, ha sido algo menor de lo que ha sido otros años “pero han sido días laborables, por lo que hay gente que trabaja y no puede permitirse estar de fiesta hasta las tres de la mañana”.
Fue el periodista Julio César Izquierdo el encargado de abrir los festejos de Nuestra Señora de Areños en la localidad y lo hizo de manera breve, concisa, directa, sencilla y, sobre todo, cercana, con versos propios en los que no se olvidó ni de las fiestas, ni de la zona.
Así, instó a participar en los eventos festivos, ensalzó las fiestas de Velilla, lo bonito de la zona y no se olvidó de los problemas acuciantes de la zona, como la despoblación o el sector minero. “¡Mineros a protestar! Que puestos a quitar…que empiecen por arriba y dejen al currito en su mina trabajar” hizo hincapié, por ejemplo. Por último, se acodó de San Glorio, el proyecto de estación invernal que Velilla espera como una posible solución a la despoblación y al paro.
Lo que sí desbordó todas las expectativas fue el espectáculo con Jinetes y caballos, que junto a unas cuantas bailarinas, realizaron las mejores coreografías de flamenco.
El entorno de la Reana se llenó de gente, que dejó el espacio justo para que los caballos pudieran hacer sus demostraciones y bailes. Un corro que rápidamente se llenó de gente que tuvo que ver por los huecos que dejaba la gente en las primeras filas. “Oficial y caballero”, la “danza del fuego” y otras muchas coreografías arrancaron los aplausos a los espectadores, que quedaron maravillados por la destreza de los equinos.
Una sorpresa que se mantuvo hasta después de los fuegos artificiales, que nuevamente volvieron a superar los de años anteriores “nos obligamos a no bajar el pistón y este año ha estado francamente bien” explicaba el alcalde sobre el espectáculo pirotécnico.