Una reunión duradera. La Peña Alacran, creada en el año 1979, es actualmente la mas antigua
Los cuarenta integrantes están repartidos por la geografía nacional y por países como Canadá
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
La Peña ‘Alacrán’ de la localidad de Guardo se creó una fría tarde de Navidad, en concreto el 25 de diciembre del año 1979, cuando se juntaron un grupo de amigos y, de aquella reunión, surgió la idea. Aunque la primera peña que se creó en Guardo fue ‘Los Trompas’, en la actualidad la más antigua es la Peña ‘Alacrán’.
Manuel Carabaza es, desde el año 2001, miembro de esta peña. «Me metí por una trampa » , recuerda. « Me dijeron que participase en la Pasión del Barrio Barruelo, y me hablaron bien de la peña. Desde entonces, no he fallado ni un solo año», comenta.
Poco a poco se ha ido metiendo en la dinámica de este grupo, hasta el punto de que en 2009 llegó a ser elegido presidente de la peña, algo de lo que se muestra orgulloso.
Hasta el momento, esta peña ha organizado diversas actividades en la localidad, tanto en fiestas como en otras épocas, por lo que casi se les podría denominar como asociación cultural, pero no se han planteado eso porque su unión es mucho más festiva y de amigos.
Entre estas actividades destacan las jornadas verdes, con plantaciones de árboles; el aniversario de la Guerra de la Independencia; la proyección del documental ‘El Tren de la Memoria’; el homenaje a Miguel Hernández, o el Trofeo de la Gaseosa.
Además, han sido reivindicativos para el barrio con el que más unión tienen, el Barrio Barruelo, donde han protestado por la supresión de la verbena del primer día de fiestas, que han logrado mantener.
Dentro de sus reivindicaciones también está la de los recursos, pues no reciben ninguna subvención del Ayuntamiento, aparte de la cesión de un local «en el que tenemos que pagar la luz», explica Carabaza. «La cartelería nos la paga normalmente el San Francisco y alguna vez nos patrocina Viajes Mundi Boy», hace hincapié, mientras asegura que los recursos procede de las cuotas de los socios y aportaciones voluntarias.
Estos socios, que alcanzan los cuarenta, están repartidos por toda la geografía mundial. Así, uno de ellos vive en Canadá y varios en Mallorca. A pesar de la distancia, muchos son los que aprovechan las fiestas para volver a Guardo.
El secreto de esta duración en el tiempo ha sido «tener más moral que el Alcoyano». Además, piensan continuar haciendo actividades, como una caravana de mujeres o una concentración de ‘tunning’.
«Siempre que podemos ayudar en algo en el pueblo, lo hacemos. Además, en las fiestas, donde va el resto de peñas vamos nosotros, y eso al final termina en que alguno necesita una semana después de las fiestas para recuperarse. Hacemos cenas, vamos de paseo a las ferias y las verbenas » asegura Carabaza, mientras recuerda que los bombos de la peña «empiezan a sonar a las 6:00 horas, dando la cencerrada».
