107 primaveras e inviernos en la Peña
Claudia Martín, la mujer más anciana de Castilla y León, celebra hoy su cumpleaños en Villaoliva
JOSE CARLOS DIEZ / SANTIBAÑEZ DE LA PEÑA
Claudia Martín García, que hoy cumplirá los 107 años, se ha convertido en la mujer más anciana de Palencia y de Castilla y León, después de que el pasado 13 de octubre falleciera en Segovia a los 108 años Basilia Alonso.
Pero a esta colección de primaveras y de inviernos en el norte palentino, no se le ha puesto casi nada por delante, porque Claudia Martín conserva su mente activa. No puede moverse con la misma soltura que hace tres años, antes de que se rompiese la cadera, pero para eso está su hija Primitiva, religiosa, que cuida a su madre con su más enérgico cariño.
¿Y cuál es el secreto de que se conserve tan bien? Esta es una de las preguntas que más frecuentemente escucha Tiva, como Primitiva prefiere que la llamen. «Quizás el chocolate que tanto le gusta tenga algo que ver», continúa orgullosa. «Solo toma chocolate Valor, una taza bien llena con un bizcocho», lo que, unido al esfuerzo que ha acompañado a su vida, le ha dado la fortaleza para llegar a convertirse actualmente en la anciana de Castilla y León, según asegura convencida su hija.
Hace 107 años que Claudia estaba nació en un pequeño pueblo de la Montaña Palentina, Viduerna de la Peña. Poco tiempo después, cuando Claudia tenía 9 años, la familia se trasladó a Villaoliva, otro enclave de la Peña, un pueblo del municipio de Santibáñez de la Peña del que está muy orgullosa. Pero también se muestra satisfecha de haber podido visitar otros lugares, como Valladolid, León o Santander, adonde ha acudido varias veces por una dolencia en el oído. Hasta hace bien poco podía mantener perfectamente una conversación, aunque los años no perdonan y el oído cada vez trabaja menos.
La vida de Claudia, como la de todos los miembros de la familia, ha estado dedicada al campo. Además, cuidaba a los animales y se hacía cargo de su familia, un trabajo que crecía con cada embarazo. Y es que Claudia Martín tuvo diez embarazos, de los que vinieron al mundo cinco hijos, de los que viven cuatro. Además, ha tenido la suerte de conocer a doce nietos y a cuatro biznietos.
Suerte también tuvo Claudia por aquel entonces de que su padre fuese un hombre culto, al que le gustaba mucho leer y tenía libros en casa. Por eso, hoy es el día que Claudia mantiene su afición a la lectura y su hija le proporciona libros piadosos con letras grandes para que lea», comenta Tiva.
Primitiva es franciscana misionera de María y se encontraba en África en misiones cuando le avisaron del mal estado en que se encontraba su padre. La decisión de volver fue dura para ella, pero viendo cómo estaba la situación en casa, con sus padres mayores y su padre muy enfermo, decidió regresar para cuidar de ellos, algo de lo que no se arrepiente «porque si volviera a nacer, lo repetiría», comenta Tiva orgullosa.
Claudia solo ha estado enferma dos veces, la primera de ellas por las fiebres maltas, y la segunda, tras tener a sus dos últimos hijos. Un problema le originó una grave infección, de la que se salvó de milagro.
Mantiene una salud envidiable, porque además de leer habitualmente, reza y hasta hace poco hacía punto y ganchillo. Una salud que también intenta conservar su hija sirviéndole cuatro comidas al día. La primera de ellas es siempre un chocolate para empezar bien el día. Para la comida, toma caldo y un vaso de manzana picada. A la hora de la merienda, come un dulce, como orejuelas o rosquillas, y para cenar, suele tomar un preparado de proteínas.
Un jardín con su nombre
La junta vecinal de Villaoliva de la Peña le dedicó el año pasado un jardín, que ahora lleva su nombre. Y es que el alcalde le comentó a la hija de Claudia Martín la posibilidad de editar un libro, pero la religiosa le pidió que, en lugar del libro, se plantase un árbol de fruto en el jardín, como por ejemplo un castaño.
Hoy, a las 12:00 horas en Villaoliva de la Peña se celebrará la habitual misa de los domingos, con la particularidad de que estará dedicada a Claudia Martín, la mujer más longeva no solo de su pueblo, sino de Castilla y León.