Compuerto abre sus aliviaderos
Las lluvias obligan a la Confederación Hidrográfica a abrir las compuertas del pantano para aliviar parte del agua
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
Las lluvias de los últimos días en la Montaña Palentina y las continuas aportaciones hídricas del embalse de Camporredondo provocaron que la presa de Compuerto tuviera que abrir ayer sus compuertas para aliviar parte del agua que le llegaba.A través del túnel del aliviadero del embalse de Camporredondo, se transferían ayer al Carrión 70 metros cúbicos por segundo que, junto a las aportaciones de diversos arroyos y del trasvase del Besandino, que aporta otros 13 metros cúbicos por segundo, hicieron que el embalse fuese rápidamente aumentando sus reservas.
Durante la jornada del sábado, el embalse había servido de freno a las avenidas del Carrión, pero ante la lluvia incesante las medidas adoptadas por la Confederación Hidrográfica del Duero para el control de los embalses incluyeron la apertura del aliviadero superior izquierdo de la presa de Compuerto. Finalmente, de este embalse se vertían 45 metros cúbicos por segundo, que tras la apertura del aliviadero a las once en punto de la mañana supusieron un incremento de caudal considerable que se vertía al Carrión y, por ende, al pantanillo de Terminor.
El abundante caudal del arroyo Calderón, que también se vierte al Carrión en Velilla, confluye en el pantanillo de Terminor, lo que hizo que este pantano, sin posibilidad de regulación por su baja capacidad, tuviese que verter nuevamente al río todo lo que recibía. El canal de Iberdrola, que desemboca en Celadilla del Río, portaba 18 metros cúbicos por segundo, el máximo de su caudal, mientras que por una de las tres compuertas, la única abierta, se vertían al Carrión 45 metros cúbicos por segundo, lo que suponía un pico de salida de 63 metros cúbicos por segundo. A última hora de ayer, el cese de las precipitaciones obligaba a la CHD a rehacer el estudio de vertidos de agua, que descendieron a última hora del día. El vertido de agua no provocó
más que un leve desbordamiento en la margen izquierda del Carrión a su paso por Guardo, donde solo inundó unos metros cuadrados de jardines.