EN TRES MINUTOS «El break es un baile muy duro que requiere de mucho esfuerzo»
Hugo Fuente Alcalá Integrante del grupo BrakinPark
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
Hugo Fuente, de 23 años, es miembro del grupo palentino Brakin Park, con el que se dedica desde hace años amostrar el arte del baile conocido como B-Boying.
–¿Cómo se forma ‘Breakin Park’?
–Juntándonos unos chicos de varios barrios a los que nos gustaba la misma música o los mismos videoclips que salían por la MTV. Las piruetas que hacían esas personas nos gustaban. Después de seis años desde que formamos el grupo, somos siete componentes.
–Comienzan en una ciudad como Palencia, con poca cultura urbana. ¿Es difícil hacerse un hueco?
–Bastante difícil, porque hasta que comenzamos a bailar pasaron un par de años. Tuvimos que salir a Valladolid para ver cómo bailaban otras personas y así aprender de ellas.
–Aunque muchas personas difaman a este tipo de grupos, ¿ustedes aceptan nuevos miembros o son ‘tribus’ cerradas?
–Lo que más he aprendido en este grupo es que la unión es fruto del compañerismo y del respeto hacia otras personas. Si quieres aprender a hacer cosas, como break o rap, la gente siempre te va a aceptar.
–¿Qué opiniones tienen normalmente las personas sobre este tipo de grupos ?
–En Palencia siempre nos ven y critican, pero después, cuando actuamos, y ven el esfuerzo que hacemos, les gusta y terminan opinando que merece la pena verlo.
No puedes opinar sobre algo si no sabes lo que es.
–¿Qué características son las principales por las que recomendaría este tipo de baile?
–Es un baile, y a cualquiera que le guste bailar y le guste la música le puede gustar el break. Luego es un baile demasiado duro y requiere de mucho esfuerzo, por lo que te ayuda mucho a madurar. Una vez que lo coges, va como la seda. Físicamente, además, también es muy bueno, porque ejercitas absolutamente todo el cuerpo sin necesidad de ir al gimnasio.
–¿Piensa que en España la cultura está muy extendida?
–La vida cultural que hay en España es riquísima, pero se fomenta solo lo suficiente como para que sobreviva. En general tenemos que acostumbrarnos más a apreciar lo que tenemos.