Guardo

Boda y excursión en el mismo día

Trece matrimonios de la provincia celebran su quincuagésimo aniversario en Guardo, en un encuentro de centros de día

JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO

Si hace dos semanas fueron 4.500 los jubilados procedentes de toda la provincia que llegaron a Guardo para celebrar la XI Convivencia de Mayores, la localidad norteña volvió a ser ayer el escenario de la celebración de un encuentro de centros de día de personas mayores de la zona norte de la provincia.
A primeras hora de la mañana y tras la llegada de todos los participantes se celebró una misa en la iglesia de Santa Bárbara, en la que también estuvieron presentes el alcalde, Juan Jesús Blanco, y las concejales María Herrero y Montserrat Riol, además del delegado de la Junta, José María Hernández, y la funcionaria Trinidad Sáiz, en sustitución del gerente territorial de Servicios Sociales, Alfonso Polanco. A la cita tampoco faltó el presidente de la Federación Provincial de Jubilados y Pensionistas de Palencia, Jesús Ortega.
Durante la eucaristía, repesentantes de cada uno de los centros de día realizaron las tradicionales ofrendas que consistieron en algo relacionado con la localidad a la que representaban. Así, la localidad de Barruelo de Santullán, ofreció la talla en madera de un minero; Aguilar de Campoo, galletas, Santibáñez de la Peña y Las Heras, flores y dulces de la localidad; Velilla del Río Carrión, una bombilla de bajo consumo; Guardo una piedra de carbón, y Castrejón de la Peña, pan y vino. También acudieron representantes de la localidad de San Cebrián de Mudá.
Durante la celebración religiosa se leyó la rima ‘Volverán las oscuras golondrinas’ de Gustavo Adolfo Becquer, dedicada a los trece matrimonios que celebraban sus bodas de oro en este año. Estos afortunados que han tenido la suerte de estar junto a la persona a la que aman durante 50 años se encontraban felices de celebrar este evento en Guardo, en el que lucieron sus mejores galas, por lo que era fácil distinguirles entre los numerosos asistentes.
De Aguilar de Campoo fueron cuatro las parejas que celebraron sus bodas de oro, aunque una finalmente no pudo acudir por motivos de salud, por lo que el regalo lo recogieron las hijas. De Barruelo fueron dos, de Velilla, tres y de Guardo, cuatro. Todas recibieron un regalo de la relojería Aparicio y un ramo de flores.
Tras los actos de la mañana, los jubilados disfrutaron de una comida compuesta por una gran paella, que fue degustada en el Polideportivo. A continuación. dio comienzo una sesión de juegos populares, para finalizar con un bingo que puso el broche final a la jornada de convivencia.

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