La crecida del Carrión y del Pisuerga motiva la alarma en la provincia
El desbordamiento de dos arroyos anega zonas de Guardo situadas en las inmediaciones del casco urbano
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
Las fuertes rachas de viento también dejaron huella en la provincia, donde la crecida de los ríos debido a las intensas lluvias fue la verdadera causa de alarma que mantuvo en vilo a los vecinos.
Así, en Guardo se produjo el desbordamiento de dos arroyos, y zonas como el Soto, la Tejera o las Vegas estaban ayer totalmente anegadas. Ante el desbordamiento del río Carrión a su paso por la localidad, la Confederación Hidrográfica del Duero decidió ayer desembalsar agua de los tres pantanos de la zona de Velilla del Río Carrión: Camporredondo, Compuerto y Villalba. Así, del embalse de Camporrendondo salían 80 metros cúbicos por segundo; del de Compuerto, 60 metros cúbicos por segundo, y de la presa de Villalba, 90, de los cuales 70 salían por el río Carrión y los 20 metros cúbicos por segundo restantes, del Canal de Iberdrola.
Además, la crecida del río Pisuerga provocó dos balsas de agua en la carretera CL-626 a la altura de Cubillo, que al cierre de esta edición no habían impedido la circulación de vehículos. El río Pisuerga a su paso por Salinas también se encontraba por encima del nivel de alarma con 107 metros cúbicos por segundo, respecto a los 97 de alarma. La caída de un árbol sobre la red eléctrica provocó además el corte de energía en Camporredondo.