El valor de los recuerdos
Los vecinos reconstruyen los principales entornos para evitar que el pueblo caiga en el olvido por el descenso de habitantes
JOSE CARLOS DIEZ / PINO DE VIDUERNA
Pino de Viduerna, uno de los doce pueblos que integran el Ayuntamiento de Santibáñez de la Peña, aunque sólo cuenta 37 habitantes, mantiene al alza sus tradiciones, como las fiestas patronales que se celebran este fin de semana y que abren la agenda festiva en la Montaña Palentina.
Cada primero de mayo, este pequeño pueblo del norte de la provincia celebra unas animadas fiestas en honor a San Adrián, una cita para el reencuentro de los vecinos y de los que un día tuvieron que emigrar a otras tierras en busca de mejores oportunidades, pero que siguen teniendo en Pino de Viduerna su casa, sus raíces y sus recuerdos.
El alcalde, Juan Carlos Mayordomo, afirma que los vecinos se resisten a quedar en el olvido, a pesar de tratarse de una de las localidades menos pobladas de la provincia. Tanto en el mandato anterior como en el actual se han acometido importantes obras que han contribuido a mejorar la calidad de vida.
La mejora y ampliación del alumbrado público, la sustitución de la red general de agua potable y la pavimentación de varias calles suponen un ejemplo de que las obras prosiguen, al igual que la reciente remodelación del cementerio, con un coste superior a los 70.000 euros y la recuperación de los espacios de la fuente del Canalito y sus lavaderos, un proyecto con una inversión de 18.000 euros. También se han realizado esfuerzos para recuperar la antigua escuela.
Centro de día
Todas estas obras han sido ejecutadas con la financiación de la Diputación y con el apoyo del Ayuntamiento de Santibáñez de la Peña, algo que Mayordomo quiere agradecer a ambas instituciones. «Pero aún nos queda mucho por hacer en un pueblo con un 70% de población mayor de 65 años. Queremos contar con un pequeño centro sociocultural para las personas mayores, y a medio o largo plazo, un centro de día y un consultorio médico», comenta el alcalde, que también se propone como objetivo atraer a Pino de Viduerna a los hijos del pueblo «para que vean que se ha convertido en un lugar de tranquilidad, agradable y de ocio, donde los niños pueden disfrutar de la libertad de correr por las calles sin ningún peligro», señala el regidor para animar a que las fiestas resulten más concurridas.
La celebración festiva de este año se ha resumido en dos sencillos momentos. Primero, la misa, a la que asistieron los alcaldes pedáneos de Villalbeto, Viduerna, Villaoliva y Cornón, así como el regidor de Santibáñez de la Peña. Esta misa fue cantada por el coro de Santibáñez.
Tras la celebración religiosa, se celebró un aperitivo en el centro parroquial, que resultó muy animado y ameno.