De la muerte a la gloria
El barrio Barruelo de Guardo vuelve a poner en escena la Pasión por vigésimo año consecutivo, a la espera de que la representación consiga ser declarada de interés regional
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
Entre el riguroso frío y la amenaza de nieve, los vecinos del barrio Barruelo de Guardo volvieron puntuales a su cita de celebrar el Viernes Santo representando la Pasión de Cristo en la plaza del barrio, una escenificación que este año ha cumplido la vigésima edición.
Aunque la afluencia de público ha resultado menor en que años anteriores, posiblemente por el intenso frío que se respiraba en la noche del pasado viernes en Guardo, los vecinos se esforzaron como nunca en representar sus personajes con realismo, con la vista puesta en su deseo de que la Pasión sea declarada por la Junta fiesta de interés turístico. Los trámites para lograrse se han iniciado justo después de que los ochenta y cinco actores se despojaran de sus vestimentas de época tras finalizar las escenas de la muerte de Jesús.
La representación de la Pasión mejora cada año debido a los numerosos ensayos que se realizan en las semanas previas y a la madurez de los actores, que en su mayoría llevan años protagonizando la historia más conocida. La puesta en escena terminó bien entrada la noche con un enorme aplauso de los asistentes, algunos muy emocionados por el gran realismo que imprimieron a sus trabajados personajes.
Además, este año los escenarios han sido renovados para disponer de más espacio para los actores y para que los espectadores pudieran contemplar mejor el desarrollo de la acción, que no por ser de sobra conocida deja de sorprender. También el equipo de sonido ha sido sustituido por otro mejor, notándose una gran mejoría.
Muchos de los asistentes que habitualmente acuden hasta el barrio Barruelo para presenciar esta Pasión viviente vuelven a repetir la cita, en la que no dejan de comentar que el paso del tiempo ha mejorado las posibilidades artísticas de los guardenses.
Pero una vez finalizado el calvario, los vecinos del barrio Barruelo encaran la última parte de la Semana Santa con una nueva escenificación bíblica: el encuentro entre Jesús resucitado y su madre, la Virgen María, que tendrá lugar a las 12 horas de hoy en la plaza de Don Edmundo, y en la que estarán acompañados por la banda de cornetas y tambores de la Cofradía Nuestro Padre Jesús Nazareno y Santo Sepulcro.
Los ochenta y cinco actores que han encarnado este año la representación de la Pasión de Cristo se han mostrado muy satisfechos del resultado, ya que el esfuerzo que llevan realizando desde hace meses con los ensayos y la preparación de los trajes y los escenarios han resuelto una laboriosa tarea con la recompensa del trabajo bien hecho, dada la buena acogida que ha tenido siempre esta iniciativa y que cada año se supera en calidad.
El tesón de la asociación de vecinos
Los vecinos del barrio Barruelo de Guardo esperan ahora que todo el esfuerzo que han desplegado durante veinte años se vea recompensado con la declaración de la Pasión como fiesta de interés turístico regional.
El director de la representación, Justo Arnáiz, ha vuelto a insistir en que «desde el barrio lucharemos con todos los medios para que nuestra Pasión sea reconocida al más alto nivel, aunque lo importante es que lleguemos a conseguir la distinción que el barrio Barruelo y Guardo se merecen».