Los hoteles de la villa no disponen de plazas libres para esta semana por la afluencia de turistas
La Oficina de Turismo calcula que más de 4.000 personas han llegado a la comarca
A media tarde de ayer, en su primer día de apertura de la nueva temporada, la Oficina de Turismo de Guardo registraba ya más de sesenta visitantes, en su mayoría procedentes de Madrid y Asturias, informándose sobre las zonas turísticas de la localidad. Ni el frío invernal, que ha tomado las calles de Guardo, ha impedido que unas 4.000 personas, según la Oficina de Turismo, hayan llegado a la villa en esta semana festiva.
El tradicional mercadillo de los viernes, que al coincidir esta semana en jornada festiva se adelantó al día de ayer, resultaba intransitable, debido a la gran afluencia de visitantes.
Aparcar un coche en la zona céntrica también resultaba ayer del todo imposible en Guardo. Por ello, en barrios como Valdecastro o La Fuente aparecían los coches aparcados incluso encima de las isletas de los cruces.
La gran afluencia de turistas se ha hecho también notar en los hoteles de la localidad, donde no queda ni una sola plaza hotelera libre para esta semana. Incluso, en los restaurantes es harto difícil encontrar una mesa disponible. En este aspecto, varios establecimientos están sirviendo comidas en varios turnos, debido al elevado número de clientes que se sientan a la mesa.