Más que un salón de baile
JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO
El Centro de Día de Personas Mayores cuenta con más de 3.200 socios, lo que le convierte en el más numeroso de la provincia
Su última celebración tuvo lugar el lunes, coincidiendo con la festividad de Santa Bárbara, que tanta emoción despertó entre el grupo de los mineros jubilados y de los antiguos trabajadores de la clausurada fábrica de Explosivos Río Tinto. Pero su actividad es constante durante los 365 días del año. El Centro de Día de Personas Mayores de Guardo cuenta con 3.280 socios, lo que le convierte en el más activo y numeroso de los de la provincia, después de la propia capital.
La alta cifra de inscripciones que registra el centro de día supone también un fiel reflejo de la pirámide de población que soporta la localidad, un municipio muy industrializado en las décadas de los años setenta y ochenta, que ha sido testigo de la decadencia de la minería y de otras plantas industriales, lo que ha ido incrementando de forma paulatina el número de prejubilados y jubilados.
Por eso, las fiestas que se celebran el centro, como la de Santa Bárbara, suponen un emotivo encuentro entre los socios, que disfrutan de momentos muy entrañables y hacen nuevas amistades. De hecho, en las vísperas de esta última celebración se han registrado nuevas altas, como las de un matrimonio de Fontecha, para poder participar en esta fiesta, según señalan representantes de los jubilados. En la fiesta se echó de menos al vicepresidente del consejo del centro, Antonio García, que tanto trabajó en la organización del festejo, pero un accidente le ha impedido asistir.
Para el director del Centro de Día de Personas Mayores, Mario Granda, la labor del centro de día no se reduce solo a las fiestas, ya que ofrece servicios y talleres que son muy aceptados por los residentes. Servicios de podología y de peluquería, junto con los talleres de gimnasia, evidencian el carácter dinámico de este centro, que aglutina a vecinos de toda la comarca, con una afluencia diaria de más de 370 personas.
«Todos dedicamos nuestro trabajo»
«Los socios intentamos que las actividades que se organizan en el centro de día sean del agrado de todos», apunta Nieves Castro, una de las vocales del Consejo de Mayores, que se muestra muy satisfecha de la comida que se celebró con motivo de Santa Bárbara en la que participaron 162 socios. «Ahora toca preparar el belén», anuncia.
«No hay lugar para el aburrimiento»
«Es una gran satisfacción organizar actividades que después son muy aceptadas, como la reciente fiesta de Santa Bárbara», opina Margarita Gil, otra de las vocales del Consejo de Mayores, que se ha encargado de recoger las inscripciones para la comida y de comprar los regalos. «Me encuentro verdaderamente feliz con los resultados», señala.
«Cada uno aporta su grano de arena»
«Ha sido una gran fiesta, que llevábamos preparando tres meses. Todo ha salido bien, aunque he pasado nervios», apunta la secretaria del Consejo de Mayores, recordando que ha sido la primera vez que los socios han organizado una comida fuera de las instalaciones. «Hemos trabajado intentando que la gente colabore y lo hemos logrado», dice.