EL OBISPO CONFIRMA EL CIERRE DEL SAT A SUS VOLUNTARIOS

NOTA PREVIA IMPORTANTE:

La siguiente noticia no ha sido publicada en el periódico para el que trabajo, puesto que la complejidad y amplitud de la noticia, han impedido ajustarlo al espacio. Debido a que creo que es importante que la gente de Guardo conozca lo ocurrido el pasado día 17 de Julio en los locales de Cáritas en Saldaña, publico esta noticia, preparada desde entonces. Por ello, queda eximido de cualquier responsabilidad el medio para el que trabajo.

JOSE CARLOS DIEZ / GUARDO

Después de que el pasado día 16 de julio en la Romería del Carmen el obispo de Palencia, Esteban Escudero, se comprometiese a no cerrar el Servicio de Atención al Toxicómano de Guardo (SAT) y a reunirse con los voluntarios al día siguiente, ha confirmado el cierre del servicio, por diversas causas que no han sido comprendidas por los voluntarios.
Aunque los mandamientos de la iglesia son muy claros con los falsos testimonios, el prelado palentino consideró oportuno acallar a los voluntarios en la romería, cuando éstos portaban una pancarta “Monseñor, el cierre no es la solución”, prometiendo que en el SAT “sólo se llevarán a cabo reformas, pero no se cierra”.
Al día siguiente, en una reunión mantenida en locales de Cáritas en Saldaña, los voluntarios recibían, nada más entrar, el reproche del obispo por haber contado con la prensa para sacar el anuncio del cierre. “Esto no es Iglesia y así no se trabaja con Cáritas” comentó enojado el Obispo. Además, leyó a los voluntarios la contestación que mandaría en forma de nota de prensa al día siguiente a todos los medios de comunicación palentinos, algo que sorprendió a todos pues “si los medios no son Iglesia ¿por qué contesta él en la prensa?” se preguntaban los voluntarios.
Después de usar un tono, un trato y unas acusaciones y valoraciones que los voluntarios no han querido entrar a valorar, porque realmente no existirían palabras, sí que han querido dejar claro que “no estamos conformes con sus acusaciones” y las han explicado una por una.
Una de las justificaciones que utilizó el Obispo para cerrar el servicio fue “la ilegal dispensación de metadona, sin ningún criterio médico. No quiero tener ninguna responsabilidad si algún día pasa algo, por eso quiero que esté fuera de Cáritas. Como depende del San Juan de Dios, que vayan allí, que tienen personal médico”. Una usuaria del servicio, presente en la reunión, explicó que ella acude con regularidad a revisiones y que, en el SAT sólo hacen de intermediarios, pues las dosis las mandan, con nombre desde el Hospital. Esta explicación no convenció al obispo, que repitió “el responsable de Cáritas soy yo y no quiero que esto se siga haciendo”.
Asimismo, los voluntarios también explicaron que el SAT “no sólo es dispensación de metadona, sino que también es prevención” a lo que el Obispo contestó “y me parece muy bien, ¿pero es necesario que llevéis el nombre de Cáritas? Estableceros como una ONG cristiana ya ya está”. Estos programas de prevención se basan en diversas campañas contra la droga, el alcohol, el tabaco y el SIDA.
No fue la metadona el único reproche que hizo el Obispo, sino que acusó al SAT de falta de información sobre actividades realizadas, lo que enfadó a todos los voluntarios, que afirmaron “informamos a diario al Equipo Directivo de Cáritas, ya que estamos sometidos a su control y aprobación, además de a las justificaciones de las subvenciones públicas que recibimos. Además, anualmente mandamos una memoria completa y detallada”.
“Es un informe de una empresa especializada, por lo que me fío”, fue la contestación del obispo, algo que enfadó aún más a los voluntarios que explicaron “el auditor no estuvo más de 10 minutos, por lo que no dio tiempo ni a enseñarle las memorias e informes”. En este punto, el obispo justifica despedir a la única empleada del SAT “porque tenemos que reducir el gasto en contratos, porque me parece excesivo. El trabajo de Cáritas tiene que ser voluntario”.
Los voluntarios explicaron que el trabajo de la técnico es el de coordinar a todos los voluntarios, así como de prestar la atención psicológica a usuarios y familiares “porque los voluntarios podemos ayudar, pero quien tiene la capacitación es ella”. El obispo afirmó que “si el Ayuntamiento se implica, se podría recolocar a esta chica, pero si no, cuando se la acabe el contrato no se la renovará”.
Por último, una de las preguntas que hicieron los voluntarios fue sobre la idea que Cáritas tiene sobre el local donde se desarrolla la actividad. En este sentido, el Obispo indicó que “se venderá para dotar de recursos a Cáritas”. Esto implicaría que el SAT se quedaría sin un local donde desarrollar su actividad. Los voluntarios le informaron de que en el mismo edificio “hay locales que llevan 20 años en venta, por lo que sería muy difícil que esa venta llegase a buen puerto”. Además, recordaron que el local “fue comprado por Cáritas Parroquial a un precio de cuasi-donación, para este fin que ahora se quiere anular”.
Como los voluntarios contestaban uno a uno todos los puntos del plan de viabilidad, el Obispo terminó contestando “bueno, como veo que no hay comprensión, no me queda otra que el argumento de autoridad y por tanto decir que ‘el SAT se cierra porque lo digo yo’”, algo que dejó a los voluntarios perplejos.